Mensajepor Truhan » Mar Nov 17, 2015 2:00 pm
Un Simple Comentario
Cuando empece en esto del cultivo, hace unos años atrás, bueno, una de mis motivaciones, era producir mi propia yerba, y así evitar todo ese podrido circuito del trafico, con todas sus desventuras. A medida que me metia más en el mundo canábico, mis intereses se modificaban, si al comienzo el interés era el cogoyo para fumar, luego paso a ser la planta, aunque no me crean, yo puedo resistir el hecho de no tener nada que fumar, pero no puedo dejar de criar, siempre tengo una planta, da lo mismo el día del año, yo soy de esos que germinan semillas todos los meses. Necesito verlas siempre.
Cuando uno se enamora de esta planta, la empieza a seguir a rastrear a investigar, experimentar. De los híbridos que cultivaba en un comienzo, el derrotero inevitable fueron las plantas puras y las landraces. En esa etapa me encuentro...
Obviamente me motiva mucho y es parte esencial de mi quehacer, ese discurso de preservación y conservación de las especies (no solo de marihuana) pero también el discurso del compartir, que es la clave para que sucedan los anteriores.
Las plantas me llevaron a los individuos y a los grupos. Los foros y redes sociales en general. El mundo canábico, yo diría, occidental. El mundo de los breeders, los foros, los grow, copas, festivales. etc. Hay mucha información e investigación, pero por sobretodo, esta la gente, ese contacto con los demás, yo lo he valorado mucho, especialmente cuando la amabilidad esta presente. Sin embargo también esta el ego, el fraude, el chamullo, el robo, las mariconadas en general.
Pero las plantas puras y landraces, nos muestran otro mundo, no solo en términos botánicos, sino en términos antropológicos, sociológicos, filosóficos etc. Aparecen las tribus, los pueblos, ahora es otra la gente y tras ella, un conocimiento anclado en mileños.
Saludos amigos